lunes, 5 de agosto de 2013

La historia de los postres de mi vida

Desde un principio estaba en mi plan tener un gato. Comencé a buscar desde marzo con poco éxito.
Dejé de buscar para sólo fantasear con la clase de gato que tendría, los nombres que le pondría y qué clase de cosas haríamos juntos.

Busqué en internet personas que dieran gatos en adopción, hasta que finalmente leí el anuncio de una chica que regalaba un gato de tres meses. Pensé que la edad era bastante buena y le mandé un mensaje.

En ese entonces yo maratoneaba Supernatural y tras varios días mientras estaba en eso, recibí la llamada. La chica sonaba agradable y amiguera mientras me hablaba de "Botitas".

"Malo" pensé "si ya le puso nombre ya lo hizo suyo".

No quería que todo fuera resumido a una transacción porque estábamos hablando de una vida, sin embargo no quería esperar, la chica al parecer sentía lo mismo, así que antes de decir que sí decidió mandarme fotos del gato.

Las recibí y vi que el gato era más grande de lo que me había imaginado, sin embargo accedí y consortamos una cita.

Mi hermana y yo nos vimos ese día para ir juntas, sin embargo la chica me llamó por teléfono para decir que cambiaba la hora porque el auto de su novio no funcionaba.

Era obvio que su subconsciente la traicionaba: se había encariñado con el gato y de una manera u otra se haría cargo de que no me lo llevara ese día.

Llegada la hora volvió a hablar y me dijo que no podían encontrar una manera de ir al lugar acordado, así que mi hermana tomó el teléfono y para pronto se ofreció a ir por el animal hasta su casa.

Anduvimos mucho y fuimos hasta las afueras de la ciudad a buscar la casa.

Nos vimos por primera vez y su novio me llevó el gato. Lo cargué e hice cariños, pero de inmediato me rechazó. Pensé que era normal, considerando que no me conocía, así que quise darle las gracias, despedirme y subir al auto, sin embargo el sujeto me lo arrebató de las manos.

"No tienes que llevártelo si no quieres".

"No habría venido hasta acá si no lo quisiera, pequeña personita insolente" pensé.

Nos ofrecieron ir hasta la casa y mostrarnos todos los gatos que tenían y contarnos la historia de "Botitas" y como fue encontrado en la carretera, además de poseer un increíble parecido con los cachorros de la camada de su pareja de gatos.

"Si no estás segura, no te lo lleves. Si no lo quieres, puedes dejarlo, no tienes que forzarte."

Era obvio que no me lo querían dar, y ninguno de mis "sí" fue suficiente, así que sólo les pedí que me mostraran los recién nacidos y en cuanto trajeron todos los gatos mis manos se fue hacia uno blanco que se hacía bolita, lo escuché maullar y supe que lo quería. Volteé un poco hacia los demás y vi los inocentes e inamovibles ojos grises en una cabecita negra sobresaliendo, lo tomé al lado del otro sólo para verlos encajar el uno con el otro en una pelotita peluda temblorosa y le dije que esperaría por esos.

Tardaría alrededor de un mes para que me llamara y me los entregara, desparasitados y vacunados.
"El blanco es en realidad una 'ella', es una niña".
Arreglamos las cosas para después esterilizarla, y tras un "qué bueno que ya te los llevas, de tenerlos yo un día más no podría dártelos: son un amor".

Tardé un puterísimo en ponerles nombre. Yo sólo sabía que tenían que ser un postre. Mi hermana nombro a la gata "Galleta", y es que ambos son unas oreos, y a falta de imaginación mi Galletilla no se pudo llamar de otra manera.
Para el gato fue más difícil. Investigaba postres y postres hasta que un día en la tienda encontré el parecido que necesitaba.
Panqué.
Panquecito y Galletita.


 

Los nuestros han sido dos meses de tranquilidad y amortz. Buscan mi calor al dormir y cuando podían, dormían en mi cuello, hombros e incluso pecho, no rompen nada pero se pelean por ahí y andan de locos, a veces dormimos juntos y ocasionalmente se levantan a lamerme la nariz o la boca (lo intentan) y dormir más cerca de mí; otras más me maúllan hasta que les hago cariñitos.
Ya están bien grandotes, pero es que hasta ahorita conseguí la cámara de vuelta. Mientras tanto han sido mi compañía en mis fotos del skype.


Gracias, pequeños postrecillos~


[En otra nota, si es que siguen aquí, muchas gracias y una disculpa por un mes de inactividad, ahora que tengo la cámara de nuevo ya puedo tener borradores más certeros y escribir. Gracias nuevamente por no abandonar mi puesto de feria de internet~]

8 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Son amortz~ Se siente bien bonito cuando otro ser vivo te quiere. Bonus points si es de otra raza.

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    2. xD jajaja me imagine a un alíen abrazándome , pero aun así tienes razón , el que un ser vivo te de amor sin exigirte nada a cambio y lo mejor que cuando llegas a casa se abalanzan contra ti y no te dicen "por que tan tarde" eso si que no tiene precio xD

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  2. QUE HERMOSOS *muere de amor*
    más que soy amante de los gatos
    Galleta es tocaya de la gatita nueva de mi novio, lolz
    A que son un amor?

    Que historia tan más cool. Como dicen que los gatos lo escogen a uno y no uno a ellos

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    1. Quién sabe si me escogieron pero no me dejan estar en la compu, a lo mejor y son señales porque Galletita se desaparece y Panquecito se sienta a oírme a tocar el piano, así que cuando dejo de estudiar va y me molesta.
      Ahora mismo juegan con el mouse. En la pantalla.
      Oh, Yuri, los gatos...

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  3. Qué historia tan linda! Y tus gatos son un amor! *o* A veces me cuesta creer como e sque hay personas a las que no les gustan los animales. Ellos son especiales, cada uno tiene su personalidad y su historia. Las amscotas son parte de la familia y muchas veces, son los encargados de alegrarnos el día. Nos acompañan cuando estamos solos y muchas veces, me gusta creer que notan cuando nos sentimos mal y deciden acurrucarse cerca nuestro para animarnos. Son nuestros mayores confidentes y amigos. Y no hablemos de aquellos que nos acompañan a dar largas caminatas por la playa. Por suerte, la casa en la que crecí tiene un patio enorme, así que siempre, desde que recuerdo, tuve mascotas de todo tipo y tamaño. Hoy en día ya no tengo tantos (sólo dos, gatos, dos perras, una tortuga y 4 cotorritas), pero hubo un tiempo en que tuve de todo, y todos eran especiales. Incluso hasta el día de hoy lo son, aunque ya no estén conmigo.

    Qué más decir? No quiero seguir yendome por las ramas :s Jajaja Los nombres que les pusiste son hermosos, no puedo evitar pensar que les quedan perfectos! Se ven tan lindos!! Cuando los tengas cerca agarralos y agrazalos bien fuerte de mi parte, si? ^^ Jaja

    Es bueno leerte de nuevo! :D Yo también estuve un poco desaparecida, epro es que mis vacaciones no fueron nda como yo las esperaba u.u Jajaja

    Un beso enorme y ya nos leeremos de nuevo! ^^

    Bye bye!

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    1. Tu tienes un animalerío, Flo, no puedo evitar pensarlo XD! Yo jamás había tenido dos gatos al mismo tiempo, es toda una responsabilidad, definitivamente no quiero hijos en este momento DX
      Si ayudan, aunque lamentablemente cuando los necesitaba mi sobrina los acaparaba, pero se siente bonito que te quieran y te den su confianza, busquen tu calor y tu cariño en específico u // u
      Tu date vuelo y vete por las ramas que quieras!
      ¿Y por qué las vacaciones no fueron como esperabas?

      Un abrazo <3~

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    2. Es que mi idea para estas vacaciones era ponerme al día con series y libros, salir a pasear con mis tías, visitar museos, y sobre todo, pasar mucho tiempo encerrada en mi pieza preparando entradas para mi blog que hace rato que empecé y nunca terminé. Pero a mis papás se les ocurrió traer de visita a unos primitos y como ellos trabajan, temriné siendo de niñera y me fue imposible hacer todo lo que yo quería hacer u.u Jaja No es algo malo, pero para mí, que prefiero estar sola, fueron las peores vacaciones que tuve nunca. Mi pila de libros por leer sigue como siempre, abandoné a Copito, no pude ver series por dos semanas y tuve que estar casí las 24 horas del día con mi primita que habla hasta los codos. Incluso hubo un momento en que me encerré en la pieza de mis papás y casi llorando le dije a mi mamá que no aguantaba más y que quería mi soledad y mi espacio de vuelta. Obviamente me llamó una exagerada y no me hizo caso u.u Jajaja

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